La publicación del RD 1620/2007, marca un antes y un después en la rigurosidad de control de las aguas regeneradas de las EDAR.
Los niveles de reutilización de las aguas depuradas, deben ir aumentando según las directrices estatales, como recurso alternativo que palie el déficit hídrico de nuestro país.
Este decreto define el marco de actuación y los límites legales en el que se puede producir esta reutilización sin generar riesgos para la salud humana y el medio ambiente.
Uno de los parámetros biológicos regulados es la cuantificación de nematodos intestinales en las aguas regeneradas.
Los profesionales del sector y estudiantes de carreras técnicas, necesitan formarse de manera específica en este tipo de extracciones, para adecuarse a los nuevos requerimientos legales.